"El problema no es el problema; el problema es tu actitud frente al problema." — Capitán Jack Sparrow
El único creador de problemas que me gusta es Larry David en "Curb Your Enthusiasm".
Una vez trabajé con un desarrollador que tenía una habilidad extraordinaria para encontrar problemas. Era como si tuviera un radar que solo funcionaba para detectar todo lo malo sobre cada proyecto. Venía a las reuniones con frases como: "Me preocupa que...", "Me da miedo que...", y mi preferida, "No se puede hacer porque...". La cuestión es que él siempre veía problemas pero no daba nunca soluciones.
Resolver problemas es una habilidad esencial cuando se trata de crear productos digitales. Necesitas identificar y abordar desafíos para que las cosas funcionen. Pero hay una línea muy fina entre la resolución constructiva de problemas y perderse en un pantano lleno de ellos.
Además, las personas que crean problemas se dedican a explotar los sesgos cognitivos, magnificando pequeños problemas hasta que parecen enormes, como si se tratara de un gigante que está a punto de aplastarte. Manipulan el miedo y la ansiedad para influir en el comportamiento. Se trata de alguien astuto que exagera el problema más pequeño hasta convertirlo en un desafío insuperable. ¿Cómo no vas a tener miedo cuando parece que es el fin del mundo?
Encontrar problemas constantemente es como una fuerza oscura que te va tentando hacia el camino de la perdición. En lugar de ver los desafíos como oportunidades, los ves como desastres inminentes. Cada obstáculo se convierte en una razón para rendirse, y la emoción de crear algo nuevo se va desvaneciendo.
Fomentando una mentalidad resolutiva
Hermione Granger resolviendo problemas, siempre
Resolver problemas es un superpoder que puede transformar a simples mortales en intrépidos e innovadores. Cuando adoptas esta mentalidad, obtienes los beneficios psicológicos de una mayor autoeficacia y motivación.
Pero estas personas no se detienen ahí; abrazan los desafíos con una mentalidad de crecimiento, siempre en busca de oportunidades para aprender y crecer. Progresan en medio de los desafíos, sabiendo que cada obstáculo es una oportunidad para mejorar sus habilidades.
Ahora, hablemos sobre cómo vencer a ese monstruo que genera problemas y abrazar al héroe que los resuelve y que llevamos dentro. Todo se trata de cambiar nuestra mentalidad y enfoque en el desarrollo de productos digitales. Aquí tienes algunas estrategias prácticas:
- Reenfoca los desafíos: En lugar de ver los problemas como obstáculos, considéralos como oportunidades para ejercitar tus habilidades en resolver problemas. Es como un puzzle esperando a ser resuelto, ¿y a quién no le gusta un buen puzzle?
- Hazlos pequeños: Enfrentar grandes desafíos dividiéndolos en tareas más pequeñas hará que no parezcan tan abrumadores, ni tan grandes.
- Abraza la curiosidad: La curiosidad casi mató a mi gato Pancho cuando se lanzó desde el balcón. Pero la curiosidad no siempre es mala, también crea personas resolutivas a la hora de enfrentarse a problemas (como mi gato, siempre encuentra una manera de evitar las reglas de la casa). Sé curioso acerca de los problemas que encuentres y te verás deseando resolverlos.
- Sé ágil: Las metodologías ágiles se centran en la adaptabilidad, la colaboración y la mejora continua, lo que las hace perfectas para solventar problemas. Los equipos ágiles descomponen proyectos complejos en iteraciones manejables. Al trabajar en ciclos cortos, pueden identificar y abordar rápidamente posibles problemas.
- Promueve un cambio cultural: El liderazgo y la cultura organizacional juegan un papel crucial. Cuando los líderes fomentan un enfoque resolutivo dentro del equipo, se convierte en parte del ADN de la empresa. Pudiendo inspirar y empoderar a sus equipos para abrazar los desafíos, demostrando que los fracasos son escalones hacia el éxito.
No crees problemas, aprende a resolverlos
Sherlock, insuperable en resolver problemas.
Volviendo a nuestro desarrollador front-end del principio. ¿Lo recuerdas? ¿Aquel que era un maestro en aplastar ideas? Bueno, conozco a su contrario. En mi equipo, hay una diseñadora que no huye de los problemas; los abraza con los brazos bien abiertos:
En lugar de decir "Me preocupa que...", dice "Me genera curiosidad cómo podemos..."
En lugar de decir “Me da miedo que...", dice “Tengo ganas de encontrar una solución para..."
En lugar de decir "No se puede hacer porque...", dice "Vamos a explorar diferentes enfoques para que esto sea posible…"
Ella no solo eleva la calidad de su trabajo, sino que también eleva la moral del equipo al crear un entorno con oportunidades de crecimiento. Ella es la heroína del equipo, aportando innovación y progreso a la mesa.
Entonces, permite que te pregunte, ¿con quién preferirías trabajar? ¿Con el que busca problemas o con el que encuentra oportunidades? ¿Con el temeroso o con el valiente? ¿Con el villano o con el héroe? No crees problemas, aprende a resolverlos.
Puedes leer el artículo original publicado en el blog de Jorge Valencia en Medium.